Ruta Provincial 193: El camino que no resiste

El deterioro de la RP. 193 que une a San Andrés de Giles con Azcuénaga es una novela sin final. Pasan los años, pasan los gobernadores, pasan las repavimentaciones, pasan los bacheos y las empresas, pasan los funcionarios provinciales y municipales, pero la ruta se sigue rompiendo igual.

La calzada reconstruida en 2010 duró menos de lo que se esperaba. Las fallas iniciales se transformaron en problemas severos que hoy, ocho años después, ponen en evidencia una serie de inoperancias que da como resultado un camino destruido, repleto de parches y pozos de grandes dimensiones.

Ya es moneda corriente ver máquinas trabajar en la zona, aunque los resultados todavía nunca fueron positivos. En el inicio del 2016 Vialidad Provincial bacheo y se volvió a romper; en Junio el municipio encargó y pagó un “trabajo profundo” por intermedio de la firma lujanense Erinland que apenas duró 70 días.

En Julio de 2017 la empresa Concret-Nor SA contratada por Vialidad Provincial realizó un trabajo de “reparación integral” que incluía una cláusula de garantía luego de los fallidos intentos anteriores. El resultado no varió demasiado, es que los vecinos al poco tiempo volvieron a sufrir las consecuencias de la desidia.

Los fondos locales y provinciales se invierten en una ruta que dura solamente un rato. Los controles escasean como los estudios sobre los materiales y/o trabajos realizados. Hoy los pozos son “escondidos” con tierra provisionalmente para que el andar sea solo un poco más “suave”.

La RP. 193 o el camino vecinal, que une a dos localidades con la ciudad cabecera es una bomba de tiempo que todos los días los automovilistas esquivan de carril a carril. Los pozos se reinventan, las soluciones todavía no.

Fuente: InfoCiudadSAG

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