De los campos de Areco a Alaska: la aventura de tres amigos que recorrerán América en una pick up 1981
Por Lucas Mich, para infocampo.com
Nada mejor que vivir una experiencia inolvidable entre grandes amigos. Así lo plantean Lucas Ivancevich (46), integrante del equipo de agricultura de precisión y capacitación del Concesionario John Deere Ratto Hermanos; Marcos Tamagnone (46), productor agropecuario; Juan Miguel Mercante (45), comerciante.
Los tres, amantes de los viajes de aventura, partieron el pasado 1° de noviembre a bordo de una Ford F 150 restaurada por los protagonistas, con una casa rodante renovada, enganchada en la pick up, lista para emprender un nuevo episodio en sus vidas.
“A diferencia de otros viajes, en esta oportunidad no nos detenemos mucho tiempo. Solo lo hacemos para abastecernos de mercadería. Estamos siempre en movimiento porque queremos alcanzar los objetivos de progreso previstos”, contó el entrevistado.
UN VIAJE QUE NACIÓ EN EE.UU
Según Ivancevich, la idea de esta travesía nació hace casi 6 años en un viaje que los tres estaban realizando en Estados Unidos.
“En ese momento hicimos el viaje en auto. En lo personal, desde que tuve el carnet siempre tenía como fantasía viajar a Estados Unidos en auto. En ese momento y hoy podemos disfrutar de ese viaja quienes lo planeamos desde el primer momento”, contó en relación a sus amigos.
Toda su vida fueron amantes de los destinos turísticos no tradicionales, lo que les impulsa tomar estas decisiones extremas pero placenteras.
“En 2019 fuimos a San Juan a ver el eclipse solar, donde nos anoticiamos que el próximo evento similar sería en el norte de México o sur de Estados Unidos en 2024. Esto fue otro pretexto que nos permitió comenzar este viaje”, admitió.
Por otra parte, señaló que en un principio, la travesía se iba a realizar antes de la pandemia. “Estaba todo preparado para partir antes. Sin embargo la pandemia retrasó nuestro viaje, aunque lo vimos como una oportunidad ya que logramos acomodar el contexto laboral y tuvimos más tiempo para acondicionar la camioneta y repensar los objetivos”, explicó.
EL SUEÑO DE LA F-150
La otra particularidad es el vehículo con el que concretan el recorrido. Se trata de una Ford Ranger F-150, fabricada en Estado Unidos en 1981.
“Es una camioneta americana que reacondicionamos para emprender el objetivo. Tenemos la idea de pasar por el lugar donde se fabricó, Detroit, Estados Unidos, y visitar la fabrica en nuestro paso”, afirmó Ivancevich.
Además, los amigos viajan con una cómoda casa rodante fabricada en Argentina a finales de los años 1970 y principios de los 1980.
“Es espaciosa, pero la adaptamos a nuestro plan. Les hicimos varias modificaciones, incluido el aire acondicionado, la calefacción y detalles técnicos, para adecuarla a nuestras intensiones”, dijo sobre el rodante donde descansan a diario, la que puede albergar de seis a ocho personas.
Por otra parte, los primeros días del viaje fueron complicados, puesto que surgieron inconvenientes que resolvieron en el momento.
“En Río Colorado tuvimos que repararle una hoja de elástico a la camioneta. Después en el dique de Ameghino se nos rompió el alternador. Lo bueno es que venimos con todas las herramientas disponibles; solucionamos los problemas nosotros mismos y estamos preparados hasta para cambiar un motor”, dijo el entrevistado.
Asimismo, hace unos días atravesaron un episodio que los marcó a flor de piel. “Veníamos tranquilos por la Ruta 40, en medio de la nada, dejando atrás El Chalten, y sentimos un gran estruendo en la casilla”, recuerda compungido.
En ese momento, observaron que una de las rueda traseras cruzaba hacia la banquina y por suerte pudieron frenar a tiempo: “Se nos rompió la grampa que sostiene la suspensión del eje. Pudo haber sido más grave”, reconoció.
Por suerte, el destino les puso en el camino a un ángel. “En medio del disgusto apareció Miguel, un mecánico de 74 años que nos prestó su modesto taller ubicado cerca de la localidad santacruceña de Tres Lagos, y junto a él pudimos reparar la casilla. Además, nos permitió que cenemos y descansemos en su casa. Estas cosas nos llenan el alma”, contó emocionado.
En ese contexto, expresó que antes de la fecha de partida, habían planeado un viaje de prueba que no pudieron realizar por varios inconvenientes. “Salimos como estábamos, sin un previo viaje de prueba. Es decir que las vicisitudes van a ocurrir seguramente, pero estamos preparados para enfrentarlas y resolverlas”, argumentó.
FUROR EN LAS REDES SOCIALES
Los viajeros tomaron la decisión crear un perfil de Instagram donde cuentan cada paso que realizan en su recorrida hacia Alaska. Lo hicieron, para tener un lugar específico donde mostrarle a su familia, amigos y seguidores cada una de sus vivencias mediante un canal de comunicación único.
“Lo hicimos a modo informativo y hoy el perfil cuenta con casi 5000 seguidores. Es una linda locura que no podemos creer”, dice eufórico Ivancevich.
En este perfil, los viajeros suben fotos de los paisajes que recorren, los problemas que fueron encontrando en las diferentes etapas del viaje y videos editados sobre cómo están viviendo el itinerario.
Observamos a muchos seguidores que ni siquiera conocemos, fascinados con nuestra historia, es una cuestión que nos divierte mucho y nos genera emociones de todo tipo”, destaca casi incrédulo.
Por último, dijo que la idea de este viaje no es convertirse en influencer ni mucho menos, sino que buscan vivir la experiencia personal de tres amigos que quieren marcar historia.
“Nuestra amistad está más allá de cualquier obstáculo. Queremos vivir esta experiencia juntos y demostrar que se pueden lograr objetivos complejos con la amistad como escudo”, concluye.
Fuente: infocampo